sábado, 10 de noviembre de 2012

La compra


En una cerrada tarde comenzó a llover. El cielo gris azulado se mostraba como una enorme manta extendida sobre nuestras cabezas sin una sola arruga. Todo estaba iluminado por una luz tenue, la poca que las nubes dejaban pasar a través de ella. El estaba tumbado en su cama y no quedaba pan y el tiempo no acompañaba a su labor. Su brazo comenzó a extenderse, se alejaba cada vez más y más. Ya había sobrepasado la distancia normal que un brazo se separa de un cuerpo. La mano abrió la puerta continuó extendiéndose a través de las escaleras. Salio a la calle. Torció la esquina y siguió calle arriba hacia la otra esquina. La lluvia sobre la piel hacia que los pelillos del brazo se erizaran del frío. La mano se acercaba a su destino. Entro en la panadería y cogió una barra. En ese mismo instante se encontraba comiendo un rico asado mojando el pan en la salsa. 

martes, 6 de noviembre de 2012

la libreta

Me reconforta volver a tomar el tintero en la butaca roja de esa sala penumbrosa de extraño acceso. Había pasado algún tiempo, y tras una larga caída en espiral se empezaba a oler el suelo. Obviamente a nadie le gusta toparse con el frío y duro firme después de hacer un descenso en caída libre sin ningún tipo de frenos, por lo que lo mas cómodo seria caer en un colchón. Me refiero al tintero. No al tintero en si, si no a las palabras. No a estas palabras ni las anteriores, ni las que vayan a venir después, si no a unas que estaban a buen recaudo bajo la butaca. O eso creía yo. El caso es que me parecía una imprudencia dejar la libreta ahí a la vista de todos por lo que opte por guardarla donde ya sabéis, y barriendo el polvo el encargado de ello arrancó varias paginas lo cual izo que se borrara parte de lo que estaba sucediendo. A fin de cuentas parte sigue ahí y el tintero y la pluma y gracias a ello conservo mi elegante figura. De modo que esa libreta quedara rellena antes o después. ¿estaréis para verlo?

lunes, 5 de noviembre de 2012

Un día de mucho calor

Cerca de tres metros de nieve habían caído. La casa estaba casi cubierta por completo, y de la ventana del ático asomo un joven que sin mas dilación se dejo caer por la ladera de temprana formación. Solo había nevado durante diez minutos. Lo mas asombroso de todo es que el sol lucia. En el lugar en el que vivía el joven nunca había nevado y el no sabia lo que era. Todo el mundo en la zona estaba un poco desorientado. El chico investigo lo que sucedía y rápidamente descubrió lo sucedido. Una gran explosión habida acabo con la fabrica de helados y las cámaras frigoríficas habían continuado funcionando, lo que hizo que ese extraño paraje se convirtiese en una nevera gigante. La gente sin ser consciente de lo sucedido empezó a disfrutar de su nuevo clima. Poco a poco el tiempo empezó a pasar y el sol no podía competir con la gran potencia de esas cámaras. La gente empezaba a tener frió y es que sus casas no estaban preparadas para esas temperaturas. Ya había pasado mas de un mes y todo estaba congelado la gente ya no aguantaba mas. Intentaron por todos los medios entrar en calor y no lo conseguían. En poco tiempo la gente comenzó a morir de frío. Esto hizo disparar la alarma en la población. todos se revolvían y buscaban la manera de combatir el frío. En un año la población había mermado de tal manera que las calles se veían vacías. En aquel lugar no tenían los medios ni los conocimientos para fabricar ropas que les protegiesen, se quedaban cortas. Finalmente la población murió. Aquel chico feliz el primer día de nieve murió como todos por no hacer lo mas lógico, apagar la cámara frigorífica.
Espero que este texto haga reflexionar a la población sobre muchos aspectos de la vida en estos momentos. Muchas gracias.

jueves, 21 de junio de 2012

La fiesta


Estaba sentado, las paredes eran negras, la butaca roja. tras el, junto a la esquina, una lampara de pie iluminaba tenue la sala con una luz rojo apagado. La butaca de cuero con remiendos y manchas de pintura echas adrede se orientaba a una gran ventana en la pared frontal. Las paredes a una altura de aproximadamente un metro y medio se vestían con una hilera ininterrumpida de cuadros en blanco con marcos exagerados y rimbombantes, diferentes cada uno de ellos. En el techo de la sala, centrado sobre la butaca, había un gran foco de aspecto antiguo, color cobrizo, y alguna que otra telaraña. El foco apuntaba a la ventana mostrando su luz al exterior. I make love to you. El tenia una libreta en su mano y una pluma en la otra. El tintero estaba volcado en el suelo y tomaba la tinta directamente del firme. Tenia varias lineas escritas. “estaba sentado...” decía una de ellas, dar imprimación al lienzo decía otra. Y es que mezclaba sus notas con sus creaciones en el mismo papel. La sala no tenia puerta de entrada aparente sin embargo del suelo se abrió una trampilla. Se trataba de un desván. Una cabeza asomaba y, seguidamente, el cuerpo detrás. Esta se sienta sobre las piernas del que esta sentado. -ya han llegado los invitados.- dice. Los dos salen por la trampilla y el primero dejo la libreta sobre la butaca. En esta las lineas escritas comienzan a desvanecerse lentamente. Y que es si no una libreta sin escritor mas que una herramienta inútil. Buenas noches.

domingo, 25 de marzo de 2012

martes, 28 de febrero de 2012

un año

hola a todos blogueros y blogueras, seguidores y seguidoras, me alegra comunicarles que hoy, 28 de febrero, este blog cumple su primer año. si amigos, hace ya un año que subía aquella foto de las secciones de césped para inaugurar lo que seria un blog de arte o lo que surgiera y asi a sido. os animo a continuar visitando mi blog y yo me comprometo a continuar publicando y espero que cada vez mas (que últimamente he andado mas liado y he subido menos) y que esto dure muchos años mas. gracias a todos por seguirme y sobre todo a aquellos que estuvieron ahí desde la primera entrada.

martes, 7 de febrero de 2012

Al 12-1-12

pequeño regalito para una muy buena persona ;)
técnica mixta sobre DIN-A4, y con esto retomo mis dibujos que ya hacia tiempo que no publicaba ninguno.

miércoles, 18 de enero de 2012

Tinta sobre papel, técnica nocturna 2


Otra vez había vuelto a suceder. Me encontraba en ese extraño lugar. Era un inmenso bosque del que no podía salir. El sitio era bastante bonito, con una espesa vegetación y unos curiosos árboles de bonitas hojas negras. Estaba anocheciendo, por no decir que estaba sumida en la negrura, y la atmósfera que se creaba era algo tétrica. En ese mismo instante me encontraba corriendo. No era una carrera por gusto, nada de eso. Había oído algo extraño a mí alrededor y no iba a quedarme para comprobar que era. Las hojas crujían cerca de mi y continuaba sin saber que las hacia crujir. Cada vez estaba más cerca de mí. En ese momento estaba asustada y solo me reconfortaba la belleza del lugar. Mientras corría tropecé con algo anclado al suelo. Me acerque a comprobar lo que era y se trataba de un tirador en forma de aro. Despejé la hojarasca que había alrededor de el para comprobar que debajo había una trampilla. Con un gran esfuerzo la abrí y una cegadora luz me inundo por unos momentos. Una vez mis ojos se adaptaron a la luz introduje la cabeza para comprobar que había en el otro lado y desperté. 

viernes, 13 de enero de 2012

Que le ves al trasluz

La luz era blanca y apagada. rodeando el verde claro, verdes y frondosos arboles hacían de techo al lugar. todo estaba lleno de ese toque de humedad que hacia del lugar algo encantador. La niebla a medio metro del suelo contribuía a un ambiente bastante romántico. En el centro del claro había una piedra plana y baja, ras de suelo si me apuras. En ella había un huevo. Era un huevo muy grande mas grande que ningún huevo que se allá visto antes. Tenia un color amarillo verdoso y era rugoso al tacto. O eso decían. El huevo llevaba mucho tiempo en el lugar aparentemente sin nadie que lo incubara. Lo que nadie sabia es que el huevo se estaba incubando por algo mas grande que ningún tipo de criatura, y una vez llegara el momento eclosionaría para llevar a cabo su cometido.